22 de gen. 2010

L'SGAE i els avis

L'SGAE i els avis

L'SGAE va intentar cobrar drets d'autor a un casal d'avis per l'us de la televisió. Els avis s'han queixat al consell comarcal del Ripollés que ha demanat a l'SGAE que afluixi amb la seva dèria recaptatòria. No crec que triguin gaire en anar als hospitals a exigir que paguin per les televisions que hi ha a les habitacions dels malalts. No sembla que res pugui aturar el comportament mafiós de l'SGAE que se sent recolzada per una legislació que en L'SGAE saben com retorçar i usar en el seu profit i en el que els ciutadans siguin perruquers o avis d'un casal se senten indefensos davant una organització que extorsiona a tort i a dret cobrant el seu “impost revolucionari” amb la llei a la mà.

La SGAE y los abuelos
La SGAE intentó cobrar derechos de autor en una residencia de ancianos por el uso de la televisión. Los abuelos se han quejado al consejo comarcal del Ripollés que ha pedido a la SGAE que afloje con su manía recaudatoria. No creo que tarden mucho en ir a los hospitales a exigir que paguen por las televisiones que hay en las habitaciones de los enfermos. No parece que nada puede detener el comportamiento mafioso de la SGAE que se siente apoyada por una legislación que en La SGAE saben cómo retorcer y usar en su provecho y en el que los ciudadanos sean peluqueros o abuelos de una casa se sienten indefensos ante una organización que extorsiona a diestro y siniestro cobrando su "impuesto revolucionario" con la ley en la mano.

2 comentaris:

Antoniatenea ha dit...

La SGAE es tan impopular y tiene tantos enemigos que la haremos entre todos durar poco!! Haremos de Robin Hood y atraparemos todo ese dinero injustamente recaudado y se lo daremos a esos africanos que venden CD en la calle para que aprendan!!...:))))
Un abrazo!

Jaume C. i B. ha dit...

El principal problema de la SGAE es que han olvidado para que existen las entidades de este tipo, ahora ya recaudan solo para si, cuando lo que deberían hacer es velar por los derechos de los autores a los que representan. También se equivocan en los procedimientos empleados más próximos a los de la mafia que a una entidad legal.